Cada vez tenemos más presente que nuestra salud mental es importante para tener una buena calidad de vida. Ahora tenemos mucha más información sobre los síntomas y problemas que nos pueden ocasionar estados de ansiedad y/o estrés prolongado. Somos conscientes y cada vez más capaces de identificarlos (que ya es un paso relevante). Muy bien, ya tienes ”la etiqueta” de lo que te pasa. Y ahora, ¿ qué puedes hacer? No hay recetas mágicas que hagan que desaparezca por completo, por mucho que nos moleste, la ansiedad forma parte de nuestro abanico de emociones (como la tristeza, el miedo, la alegría…) y, por tanto, no podemos dejar de sentirla en algunos momentos de nuestra vida.
La ansiedad cumple una función y no debemos ignorarla.
Sí, lo sé… acabo de derribar uno de tus propósitos (dejar de tener ansiedad).
La buena noticia es que sí puedes manejar su intensidad (del mismo modo que puedes controlar el volumen de tu televisión) y reducirla a unos niveles casi inapreciables o imperceptibles.
Para esto es importante que identifiques de dónde viene “el ruido” y una vez lo tengas claro, tocar las teclas que necesites para “bajar su volumen”. Si no puedes identificarlo puedes ir a un profesional de la salud mental para que te ayude a encontrar su procedencia y ponerte manos a la obra.
Y ahora estarás pensando…”Vale, ¿Y mientras tanto que hago con toda esta ansiedad?” Son varias herramientas las que puedes usar: realizar relajaciones guiadas, progresivas, técnicas de respiración… ¡Pero sin duda una de las cosas más sencillas es… bailarla!!
Existen varios experimentos científicos que han demostrado los beneficios del baile en la salud mental. Un estudio realizado en 2010 encontró que el baile en grupo puede mejorar la confianza y la autoestima en personas mayores. Otro estudio publicado en 2013 mostró que el baile puede ser efectivo para reducir los síntomas de la depresión en adultos jóvenes. Además, el baile también puede ayudar a mejorar la memoria y la capacidad cognitiva en personas mayores, según un estudio publicado en 2017. En general, el baile puede ser una forma efectiva de ejercicio físico y mental que puede ayudar a mejorar la salud mental y el bienestar general.
La música acompañada de movimiento (bailar) nos aporta muchos beneficios.
Entre otros, mejora el rendimiento físico, mental, aumenta la autoestima, previene el envejecimiento cerebral, ayuda a regular las emociones, mejorar el estado de ánimo, disminuir la sensación de dolor, favorece la producción de endorfinas que ayudan a rebajar el estrés y/o ansiedad e incrementa la sensación de bienestar general. Baila como tú quieras bailar.
Puedes bailar, andar o mover alguna parte de tu cuerpo al ritmo de la música en cualquier momento y lugar, solo necesitas unos cascos y una música que te haga sentir bien y dejarte llevar.
¡¡ Que la música te acompañe, siempre !! Aquí sólo importas tú.
